Los vecinos del Rincón de Caya reparan el camino tras una semana aislados en Badajoz

El entramado de parcelas y casas dispersas en el Rincón de Caya tardará en recobrar la normalidad. Ayer a mediodía, José Trejo, Juan Espino y José María Carrasco esperaban en el camino enterrado hasta hace dos días por la lluvia a que llegaran los camiones de grava. Han estado una semana aislados, entrando y saliendo a sus parcelas con una barca que se fabricaron para salvar el cauce del río. Ahora toca volver a reparar el hueco que se ha llevado por delante la avenida y pagar entre todos las horas de trabajo de la excavadora y el importe de los camiones que descargan tierra en el relleno.