«No es preocupéis, la Virgen va a permitir que llueva lo que ella quiera» en Badajoz

La solemne coronación de la Virgen de la Soledad se desarrolló con una precisión milimétrica. Incluso los detalles que no podía controlar la hermandad, como la lluvia, hicieron acto de presencia justo en el momento preciso. «No os preocupéis, que la Virgen va a permitir que llueva lo que ella quiera, ni una gota más ni una gota menos», dijo el vicario general cuando comenzaron a aparecer los paraguas.