«Vivimos con un erial en la puerta de casa que atrae a cucarachas y ratas» en Badajoz

Es un pequeño rincón desértico que trae más de un quebradero de cabeza a los vecinos que viven delante de él. En la esquina de la calle Santo Cristo de la Paz con la carretera de la Corte hay una pequeña isleta que está sin asfaltar ni ajardinar. Un manto de tierra se extiende delante de varios inmuebles, cuyos inquilinos se quejan de los problemas que origina este pequeño terreno. «Se convierte en un barrizal cuando llueve y se levanta mucho polvo cuando hace aire. Yo no puedo abrir las ventanas de casa porque entra muchísima arena», dice José Barroso. «Vivimos con un erial en la puerta de casa que atrae a cucarachas y ratas. Cuando vengo a las 5 de la mañana siempre me encuentro alguna por aquí rondando», indica Antonio Méndez, responsable del bar Méndez.