Un escape de gas propano obliga a desalojar el Residencial Lope de Vega en Sin categoría

48 familias, 48 damnificados. «Tenemos que echar una quiniela o una Primitiva ya. No es posible tener tantas desgracias», bromeaban y ponían a mal tiempo buena cara algunos residentes. Poco después de las 10 de la mañana comenzaron a salir a toda prisa de sus casas hacia el exterior, en la calle Juan Ramón Jiménez. El Residencial Lope de Vega, el mismo en el que se hundió la fachada en febrero, el mismo cuyas deficiencias están denunciadas ante el juez, era desalojado. Esta vez la culpa era de un escape de gas.